lunes, 12 de octubre de 2009

Amores de altura.

Ella esta lista para enfrentar la noche, lleva poca ropa a pesar del frio, pero eso no importa, se pone un abrigo se mira una vez más el trasero y sale feliz.
El está inquieto y asustado, todo es tan diferente y a la vez tan similar, se siente en casa en un lugar que ni siquiera entienden una sola palabra de lo que dice, también tiene frio, no lleva mucha ropa pero sabe que el alcohol dentro de unas horas hará su efecto y no tendrá problema con eso.
Ella está con sus amigas, se rien, se arreglan la ropa entre ellas, se comentan los últimos chismes de las últimas dos horas y rein como locas, están muy maquilladas, creen que se ven bien, fuman como locas, es por el frio?, no lo saben, sólo se sienten sexys, se comienzan a empilar, piden tragos baratos finalmente después vendrán los buenos, se toman fotos, una de ellas dice: mejor ahora antes de estar hechas mierdas y todas rien, coqueteean frente a la cámara, esos escotes no son de niñas, hace mucho que ellas ya no son niñas.
El está con dos amigos más en esa ciudad fria y caliente, fea y bonita, tranquila y movida, todo a la vez, es como un oasis en medio de un montón de cerros, en donde el tiempo pasa porque tiene que pasar pero hay mucha tecnología, eso si avanza rapido,hay gente con mucho dinero, con muchos aparatos modernos y ellos tres están listos a gastar en diversión y cariño saben que el plástico lo soporta todo. Ellos no rien, tampoco hablan mucho, solo miran alrededor, piden una botella de whisky no les importa que etiqueta es, simplemente quieren embrigarse.
Ella ya lo vio, y piensa que él no se ha dado cuenta, ya puso sus ojos en él y desde luego que irá tras él, se quita la casaca y deja entrever el piercing que lleva en el ombligo, no es de brillantes, no habría forma que lo sea, pero brilla mucho y sabe que él la mirará en algún momento de la noche, se mueve, baila, hace de todo para llamar su atención, pero nada él no la mira, sigue con la vista en el vacío, mojando sus labios de alcohol, él no lo sabe pero esa indiferencia la excita, ella quiere estar de todas maneras con él, parece que tiene dinero piensa ella, si pide whisky debe ser por algo, está bien vestido, que lindos sus zapatos, hummm paga con tarjeta, si definitivamente es él, yo lo quiero a él.
El empieza a aburrirse, se dice asimismo estoy tan lejos y al final todo es igual, ni el whisky hace que todo se vea mejor, pero de momento perturba su tranquilidad unas risas y flashes de un grupo de lugareñas, se ven corrientes, pero algo tienen, hay una de ellas, muy extraña su belleza, es tan delgada, su silueta es muy sinuosa parece que fuera de cuento, tiene un ombligo hermoso, su cabello tan oscuro me hace recordar a aquella chica del servicio militar que jamás quiso hablar conmigo, pero ella jamás sonreía, parecía siempre estar enojada o triste, en cambio ella rie sin parar, será feliz?, quien puede ser feliz en este pais donde no hay nada, será feliz?, yo soy feliz?... no hay respuesta sólo un sorbo mas de whisky, los otros dos no logran notar todo lo que pasa por la cabeza de él, solo miran a un par de extranjeras muy borrachas con tipos de acá, ellos las tocan, se rien, sus pieles trigueñas de notan más en las espaldas muy blancas de ellas, ellos dos sólo rien sin hablar, sin mirarse sin decir nada.
Ella está lista, finalmente siempre está lista, tal vez este es, este es el que me sacará de acá, estoy harta de servir comida y tragos a tipos que huelen mal, estoy harta de esta ciudad que me libera pero a la vez me reprime, sólo quiero estar en otro lado, mi cuerpo es la mejor escalera que tengo para ascender, tiene que ser de una vez, iré hacia él.
El la ve venir, la mira fijamente, ella le sonrie, le estira el brazo y él mira a sus amigos, ellos sonrien y va hacia ella, ella baila, él se para a su lado mueve torpemente el cuerpo pero la mira moverse onduladamente, ella se acerca a él y le dice whats your name?, él se sorprende que ella hable inglés y le dice Jonas ella bromea torpemente like Jonas Brothers? y rie con el rostro hacia atrás, el recuerda a la chica del servicio militar, igual de hermosas y una sonrisa lo cambia todo piensa, él rie quienes serán los jonas brother se pregunta? no importa, ella está alegre, es contagiosa.
Él le invita un trago, por fin un trago decente piensa ella, intercambian sonrisas, ella luce su inglés, nunca mejor aprendido, llevó un curso intensivo en bares de la zona y él comienza a sentir el calor del trago y por supuesto de ella.
where`s your hotel, pregunta ella, very near contesta él, ella sonrie y él entiende la sonrisa más que las palabras, se van juntos, sabiendo sus nombres, que ambos tienen facebook y que él no es "gringo" sino israelí, a él no le intersa mucho la historia de ella, solo que conoce la zona y podría ofrecerle compañía y tour gratis, bueno no tan gratis pero más agradable.
Ella se despierta, no sabe exactamente en cuál de todos los hoteles se encuentra, revisa con la mira la habitación y reconoce el logo del mismo, mira a su alrededor y hay mucho lujo, ella está feliz. El se despierta, la ve desnuda y piensa que fue la mejor opción de la noche, ahora de día ese maquillaje exagerado ya no le desagrada tanto, le invita el desayuno, ella evidentemente acepta, es más ya sabe que pedir.
Ella y él pasan dos semanas divertidas, excitantes, felices, él se va a su país, las vacaciones terminaron, ella piensa si se va y no me dice que vaya con él, no importa hoy salgo a la disco y juego otra vez mi lotería, algún día me pasará eso, algún día seré como esa mujer que se fue con su gringo y regresó con mucha plata, algún día yo tendré lo que tengo quiero, mientras tanto seguir enseñando mi piercing.
El llega a su pais, sonrie al recordarla, sus amigos también tienen la misma sonrisa, también rieron con mujeres como ella, pero la realidad es otra y ellos cuando se reunen recuerdan esa noche que no iban a salir pero algo hizo que fueran hasta allá, destino?, magia?, quien sabe.
Todo vuelve a la normalidad, ellos a sus vidas ajetreadas y llenas de negocios y ellas a maquillarse una noche mas.